Tras los trámites de la frontera, empezamos nuestra ruta dirección al faro de Cabo Espartel. Fue el primero que se instaló en las costas marroquíes.
Pero el Cabo Espartel no puede considerarse sólo un cabo más. Es el lugar donde se une el mar Mediterráneo con el Océano Atlántico. Pese a que, generalmente, se dice que la unión se produce en toda el área del Estrecho de Gibraltar, el Cabo Espartel sería el lugar exacto donde se funden ambas aguas. Y, debido a la diferencia de densidad de cada una de las masas de agua, es posible apreciar el lugar donde el mar se convierte en océano.
Buscando la ciudad de Larache, la que fue ciudad del Protectorado Español desde 1912 a 1956 y a tan solo 40 km del Cabo de Espartel, podremos visitar el pueblo de Asilah, que también formó parte del protectorado español en Marruecos, hasta su independencia de este país en 1956.
Haremos un alto en el camino en la ciudad de Rabat, capital del Reino Alauí. Es una parada de prestigio donde la calma y discreción conciertan con refinamiento y arte de vivir. Ciudad moderna que supo preservar su autenticidad. Rabat combina con elegancia su centro histórico y su parte moderna.
Nuestro objetivo de hoy es la puerta del Sur por excelencia, Marrakech. Por ella han accedido caravanas de camellos, bereberes, tuareg y todas las razas que definen a un mercader y a un viajero.
Hoy tendremos el día para visitar esta ciudad amurallada llena de palacios, jardines y mezquitas, también llamada la ciudad roja y en la que es casi una obligación perderse por la medina y regatear en el zoco. Es una ciudad que te ofrece increíbles atractivos.
Y hoy en día, esa mezcla converge en uno de los rincones más variados del planeta, la plaza Jemaa el Fna, repleta de historia, magia y aventuras, donde sentirás el gran ambiente que tiene la ciudad.
Lo que haremos es perdernos por sus calles laberínticas de la medina, cruzar las grandes puertas de la muralla, visitar antiguos palacios y mezquitas, regatear en los zocos y disfrutar de una de las mejores gastronomías del mundo.
Marrakech mantiene ese ambiente exótico que nos resulta tan atractivo a los europeos.
Aunque nuestro objetivo de hoy es la ciudad Ouarzazate, que se encuentra a los pies del Atlas y a 1160 m de altitud, siendo la puerta del desierto y valle donde se unen los ríos Draa y Dades, en un cruce de caminos saharianos, empezamos la ruta rumbo hacia Ait Ben Haddou, ciudad fortificada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO desde 1987, una de las kasbash mejor conservadas de Marruecos y donde se han rodado numerosas películas como Babel, La última tentación de Cristo, Asterix y Juego de Tronos entre otras.
En nuestra ruta de hoy, serpentearemos el Alto Atlas a través del puerto de Tizin’ Tichka con una altitud de 2260 metros sobre el nivel del mar, siendo el puerto asfaltado más alto de Marruecos.
Después de la experiencia del desayuno y de saber que ya nos encontramos en las puertas del desierto, pondremos rumbo siguiendo la ruta de las 1000 kasbash hasta la tan esperada Garganta del Dades y sus famosas curvas reviradas, no sin antes hacer un alto en el valle de las Rosas (KalaatM’Gouna), contraste de paisaje y colores verdes de los oasis y rojizos de sus tierras y Kasbash. Zona dedicada al azafrán y principalmente al cultivo de la rosa de Damasco para fines cosméticos.
Desde allí tomaremos rumbo hacia las Gargantas del Todra, una magnífica formación rocosa con desfiladeros de hasta 300 metros. Una vez finalizada esta visita y después de comer en ruta nos orientamos a nuestro tan deseado final del día, el majestuoso Erg Chebbi, en Merzouga.
El último día del año, donde iremos en dromedario para ver un atardecer maravilloso desde lo alto de las dunas del Erg Chebbi y acabar en un campamento para celebrar una noche especial, vuestro fin de año en el desierto del Sahara, bajo un cielo estrellado como pocas veces se ven. Te ofrecemos una divertida y original nochevieja en el desierto, donde disfrutaréis de una cena especial y un espectáculo de música tradicional bereber en directo.
Una autentica e inolvidable aventura en el desierto, descubriendo lo más interesante del Erg Chebbi y sintiéndote un auténtico Beréber.
Primer día del año. Tendremos una ruta corta, donde nos costará despedirnos de la noche vivida. Una ruta donde nos seguirá sorprendiendo el camino. Donde nos ilusionará contemplar el majestuoso valle del Ziz.
Donde llegaremos hasta el final de nuestro recorrido de hoy, a la ciudad de Midelt, ciudad y centro comarcal situado entre el Atlas medio y el gran Atlas , en las faldas del monte Ayachi, junto a un pequeño río que drena en el extenso oasis del valle del Muluya, a 1.488 metros de altitud.
Hoy toca una gran ruta. Descubriremos las montañas del Atlas medio donde exploraremos pequeños pueblos y un paisaje ondulado de bosques de Cedros y picos. Por un momento nos empaparemos de la sensación europea de Ifrane, a veces llamada la “pequeña Suiza” desde donde descenderemos a la ciudad bereber de Azrou para ver los monos que se encuentran en los bosques cercanos de árboles de Cedro. Almorzaremos en ruta y pondremos rumbo hacia nuestro destino, la ciudad Imperial de Fez, ciudad que no deja indiferente a nadie. Su medina, Patrimonio Mundial de la Humanidad por la Unesco, auténtica donde las haya y con herencia de la cultura andaluza, judía y bereber. Reconocida como el área peatonal medieval más grande del mundo.
Tras un maravilloso desayuno, emprendemos nuestro día en ruta dirección Chefchaouen, lugar inolvidable, donde te enamorarás inmediatamente de sus colores azules y atmósfera relajada.
Cuenta la leyenda que cuando los musulmanes fueron expulsados de la península, Catalina Fernández, una mujer de Vejer de la Frontera (Cádiz) casada con el Emir marroquí Sidi Ali Ben Rachid, echaba tanto de menos el pueblo, que éste ordenó construir Chefchaouen a imagen y semejanza de Vejer.
Aunque no sin antes, visitar el sitio arqueológico que nos recuerda el paso de Roma por esta región, VOLUBILIS ( فولوبيليسWalili). Fundada en el Siglo III a.C., la ciudad de Volubilis, fue un importante puesto de avanzada militar del imperio Romano en el que se erigieron múltiples monumentos de gran belleza.
- Roadleader (guía en moto) | - Motocicleta y combustible - Parking público o privado |